Ventajas de delegar
Delegar es una de las actividades que más complicadas, una de las que más nos cuesta llevar a cabo. Y no es de extrañar, ya que delegar una tarea no sólo supone encomendar su ejecución a otra persona, sino asumir los riesgos que ello supone. Al delegar otorgamos a otra persona la posibilidad de realizar esa tarea o actividad en nuestro nombre, automáticamente asumimos las consecuencias de algo que no controlamos de manera directa.
Teniendo en cuenta lo que supone delegar, es evidente que para hacerlo de manera efectiva, hay un factor imprescindible que debe estar siempre presente: la confianza. Para que la delegación de los frutos que se esperan, debe existir confianza y la total seguridad de que la persona a quien se encomienda la tarea, es capaz de realizarla y además muestra interés por hacerla.
Si tenemos en cuenta todo lo anterior, resulta sencillo entender por qué es tan complicado delegar, por pequeña que sea la tarea… Sin embargo, es importe saber y tener en cuenta también que, a pesar de no ser fácil, delegar ofrece muchas ventajas y se torna un proceso imprescindible para alcanzar el éxito…
Ventajas de delegar
No somos omnipotentes, es muy complicado que una sola persona sea capaz de abarcarlo todo, de desarrollar y llevar a cabo todas y cada una de las tareas y actividades que requiere y exige cualquier proyecto, por pequeño que sea. Y es que, cualquier proyecto (o empresa) requiere del desarrollo de múltiples tareas que precisan de tiempo.
Todavía existen profesionales que quizá por muy diversos motivos, evitan delegar algunas tareas, lo que les lleva a trabajar de manera continua al cien por cien de sus posibilidades. Y esto, en muchos casos, puede ser contraproducente, más que positivo o beneficioso para el proyecto o la empresa.
Apostar por delegar, sin embargo, cuando sea hace de la manera adecuada, se logra multiplicar y potenciar las capacidades de las personas, obteniendo así resultados positivos en todos los sentidos: organización, tiempo, colaboración, participación, de cara al alcance de los objetivos, la calidad del trabajo, los resultados, etc.
Cómo delegar de forma efectiva
Delegar no es fácil, pero sí es imprescindible. Y saber cómo y a quién delegar, es muy importante.
A continuación os enumero algunas claves básicas a tener en cuenta al delegar una tarea o actividad para obtener los mejores resultados:
- No olvidar la tarea
Cuando hablamos de delegar, a veces se tiende a pensar que es sinónimo de olvidar. Craso error. Que encomiendes a otra persona una tarea o actividad no implica que puedas olvidarte de ella. Y no debes olvidarte. La otra persona la realizará, pero tú debes saber y seguir lo que hace, llevar un control. - Si te cuesta delegar, pregúntate si es realmente necesario que lo hagas tú
No es fácil delegar, especialmente algunas tareas o funciones, pero se puede aprender a hacerlo. Probablemente al principio te cueste más… Te recomiendo que, en esas tareas en las que más te cuesta, te hagas esta pregunta: «¿realmente es imprescindible que sea yo quien lo haga?» «¿Cuánto cuesta que lo haga yo, en tiempo y dinero y, cuánto cuesta que lo haga otra persona, x?» Respóndete con sinceridad y valora todas las posibilidades y opciones que hay. - Apuesta por la formación de las personas en las que vas a delegar tareas o funciones
Para delegar y hacerlo de forma efectiva y eficaz, es imprescindible confiar en la persona a la que se le encomienda la actividad. Bien, pues para confiar en esa persona debemos tener la total seguridad de que es capaz de realizarla con el nivel de exigencia que exige la propia tarea. Y para conseguir esto, la formación juega un papel importante; no tengas reparos en invertir todos los recursos a tu alcance en la formación de empleados o las personas con las que vas a trabajar… - Crea un ambiente de confianza
La confianza no se puede construir sobre una base de miedo e inseguridad. Por ello es necesario que el ambiente de trabajo sea de confianza y seguridad, de manera que cada una de las personas que participan en el proyecto o forman parte de la empresa, se sientan cómodas y sean capaces de tomar decisiones sin miedo a la equivocación. - Motiva e implica a tu equipo
Dale un sentido y un porque al trabajo encomendado y delegado a cada persona. Reconoce su contribución y hazle saber el valor de su aportación específica, al total del proyecto global al que pertenece. Ofrécele la oportunidad y el reto para que proponga propuestas de mejora en el desempeño de su trabajo dentro de este contexto global, y también la posibilidad de que su trabajo sea visto y reconocido en otros departamentos de la compañía. - Establece objetivos claros
Marcar los objetivos e indicar los pasos para conseguirlos es clave para una delegación efectiva. Procura que cada una de las personas con las que trabajas conozca muy bien los objetivos y sepa cuál es el camino por el que se va a andar para alcanzarlos.
Delegar no es tarea sencilla, pero los resultados se pueden multiplicar gracias a ello. Por eso, si te cuesta hacerlo, te recomiendo que comiences dando estos pasos con las tareas que menos responsabilidad requieren. Poco a poco comprobarás que delegar tareas te permite disponer de más tiempo que puedes destinar a funciones más relevantes, multiplicando así tus propias capacidades y también potenciando y acelerando el alcance de los objetivos.